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19 diciembre, 2020

Doble limpieza facial: cuándo, cómo y con qué productos

Ahora que ya has asumido que no puedes ir a dormir sin desmaquillarte y que eres consciente de la gran importancia para la salud de la piel de hacer una limpieza facial por la mañana y otra por la noche, llega el momento de introducir otro paso: una doble limpieza. Sí, hablo de ese ritual que las coreanos ya nos hablaron en su famoso ritual.

La doble limpieza es una práctica muy recomendable, la base de una piel de apariencia fuerte y bella es gracias a la constancia en la rutina de higiene, diaria y semanal, y en la protección solar.

Esta doble limpieza no será igual para todas las personas, debe estar adaptada al tipo de piel, siendo apta para todo el mundo. Lo esencial es encontrar los productos adecuados.

Se trata de una limpieza en dos partes, pero no por ello es más agresiva.

¿Cuándo hacer la doble limpieza?

Lo ideal sería hacerlo por la mañana y por la noche. No se trata de un problema de tiempo sino de crear estos hábitos.

La primera fase

 Cada persona debe adecuar los cosméticos al tipo de piel, hay una clase de limpiadores que son los más adecuados para la primera fase y otros para la segunda. En el paso inicial se necesita un producto con textura oleosa, para eliminar de forma suave los residuos que acumulamos durante el día como el maquillaje, el exceso de sebo y los filtros de protección solar.  Los de base oleosa consiguen penetrar mejor en el poro y eliminar la suciedad que se suele almacenar.

Aprovechar el uso de este tipo de producto para realizar un masaje en el rostro, cuello y escote. El automasaje favorece la circulación sanguínea y contribuye al brillo de la piel.

Para hacerlo:

  • Masajea el rostro en dirección de los músculos. Empieza debajo de los pómulos y utiliza los nudillos de los dos primeros dedos (con la mano cerrada en un puño) para masajearte.
  • Utilizando los nudillos sube por los lados de la nariz hasta la parte superior de la frente y después baja por los contornos.
  • Con las yemas masajea la zona del contorno de ojos, empezando por el puente de la nariz y siguiendo hacia fuera, en dirección a la sien.
  • Enjuaga y seca dándote toquecitos con la toalla.

La segunda fase

 Elije un producto con textura acuosa, tipo gel, mousse suave o agua micelar, para retirar todas las impurezas sin base grasa, que serían las partículas contaminantes  y las células muertas acumuladas durante el día.

Una tercera fase

 A la doble limpieza se debe añadir un tercer paso, el tónico, producto obligatorio en la rutina de limpieza. Este producto no se aclara como los anteriores, sino que se deja actuar sobre la piel. Tiene una función humectante, equilibrante y ayuda a cerrar el poro y a dejar la piel lista para la absorción del tratamiento.  ¿Un truco para extenderlo? Utilizarlo en un bote de spray para rociarlo y luego esparcirlo con suaves toques con los dedos.

Acércate por la Farmacia Coello 74 y te ayudaremos a escoger los productos más adecuados según tu tipo de piel.

Pilar Gay

(https://www.freepik.es/fotos/personas Foto de personas creado por drobotdean – www.freepik.es)

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